viernes, 9 de marzo de 2012

¿Casualidad?

Siempre he pensado en tener una familia numerosa, como la mía, y esto no es secreto para nadie. Aunque, desde hace algún tiempo tengo una inquietud. ¿Cuál? ¿No sería egoísta de mi parte querer traer 3 o 4 hijos, 2 o 3 varones y 1 hembra, inocentes y llenos de esperanza a un mundo tal podrido como este?

Cuando tuve mi primer novio, siempre creí que tenía demasiada suerte al no quedar embarazada, aún cuando algunas veces teníamos relaciones sin responsabilidad alguna. Con el paso del tiempo, comencé a pensar ¿será suerte o hay algún problema conmigo?

Dejé de pensar en que tenía algún problema porque tengo tiempo sin hacer nada que tenga ese tipo de consecuencias. ¿Qué me hizo pensar en eso de nuevo? La prolactina. Cuando te haces exámenes de sangre y los valores de la prolactina son altos, normalmente, es porque estás embarazada y tu cuerpo se prepara para la lactancia. Yo no lo estoy. A menos que sea la reencarnación de la virgen María.

Según me comenta una odontóloga, el hecho de tener la prolactina alta es consecuencia de que tu cuerpo cree que estás embarazada por lo que tienes períodos sin ovulación. Obvio ¿cómo vas a ovular si ya estás embarazada? Y más preocupante que eso ¿cómo quedar embarazada si ya lo estás?

No haré de esto un drama, todavía, porque no he hablado al respecto con mi ginecóloga, pero no puedo evitar darle vueltas en mi cabeza. ¿Y si resulta que no está equivocada? ¿Y si lo confirma la ginecóloga con algún examen? Eso me lleva a la conclusión que, tal vez, pueda parecer tonta para algunos. Siempre he dicho que no creo en la Iglesia, pero sí en un ser superior al que llamo Chucho, por cariño.

¿Qué pasa si Chucho me está dando una señal? ¿Será que esa es su forma de darme a entender que estoy en lo cierto al afirmar que sería egoísta de mi parte traer a seres inocentes a este mundo podrido? No lo sé. Ya veremos si es simplemente una coincidencia.